El empleo masivo de antibióticos en salmones de cultivo amenaza tanto a sus trabajadoras, como a la salud humana y el medio ambiente marino costero.
Esta industria exportadora intenta hacer una campaña de maquillaje comunicacional de las masivas infestaciones de parásitos en salmones chilenos de exportación.
Santiago de Chile, 23 de octubre, 2023. (Ecoceanos News).- SalmonChile presentó su VIII Informa de Sustentabilidad, en el cual reconoce el empleo de 341 gramos de antibióticos por tonelada de salmón cosechado durante el 2022. En la temporada 2021 el empleo de antimicrobianos en la producción de salmones a ciclo cerrado fue un 19% mayor.
La patronal salmonera ha reiterado que tiene como meta reducir en un 50% el uso masivo de antibióticos en sus producciones. Sin embargo, pese a la campaña comunicacional que pretende simular un avance en esta materia, la salmonicultura chilena presenta el récord mundial de uso masivo de antimicrobianos por tonelada de peces producidos destinados mayoritariamente a la exportación. Esto convierte a la industria salmonera en uno de los mayores responsables de potenciales situaciones de resistencia bacteriana que amenazan gravemente tanto a la biodiversidad marina, como a la salud humana en Chile.
Industria intenta maquillaje comunicacional de las masivas infestaciones de parásitos en salmones chilenos de exportación
Además, SalmonChile en su VIII Informe de Sustentabilidad, que entrega sólo información de 10 empresas que conforman esta asociación, reconoce el empleo de 5,3 gramos de antiparasitarios por tonelada de salmón cosechada.
Según el documento, la infestación de salmones en los centros de cultivo presentó un promedio de 3,1 a 2 piojos de mar (Caligus rogercresseyi) por pez durante el 2022. Este antecedente de infestación parasitaria es el más bajo desde 2013.
Por su parte, el empleo masivo de plaguicidas como el benzoato de emamectina, los piretroides deltametrina y cipermetrina, y el organofosforado azametifos, utilizados por inmersión en nuestro mar, provocan una creciente pérdida de sensibilidad y resistencia de los parásitos a los diversos químicos empleados por la industria.
Los plaguicidas empleados por la industria salmonera son letales para la viabilidad de los huevos, larvas y ejemplares juveniles de peces, crustáceos y diversas especies bentónicas, afectando a la cadena trófica, la salud humana y economía de los pescadores y las comunidades de recolectores de orilla en el sur de Chile.
Contradiciendo a la estrategia de marketing comunicacional de SalmonChile, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura ( Sernapesca) ha señalado que, en las primeras 13 semanas de 2023, los centros de cultivo intensivos de salmones de la región de Aysén han superado el límite que establece la entidad estatal para la presencia del piojo de mar en 147 ocasiones, pasando a denominarse Centros de Alta Diseminación, según el Programa Sanitario específico de Vigilancia y Control de Caligidosis.
Sólo en la región de Aysén, entre enero y marzo de 2023, hubo centros salmoneros industriales que registraron promedios de piojos de hasta 80 ejemplares de parásitos por salmón en 147 ocasiones. La infestación de piojos de mar provenientes de los centros de cultivo también aumentó la mortalidad de peces de especies nativas, tales como el róbalo, el pejerrey o el lenguado.
Salmón químico Industrial ¡Fuera de nuestras mesas y de nuestro océano!
El director del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas, señaló que “hacemos un llamado a los consumidores nacionales e internacionales a tomar conciencia respecto del empleo de antimicrobianos y antiparasitarios de parte de las diversas empresas productoras de salmón chileno, informándose adecuadamente sobre lo que están consumiendo al comprar y comer salmón de cultivos industriales intensivos”.
“Es clave que exista mayor transparencia e información de parte del Estado y la industria sobre las cantidades de antibióticos y antiparasitarios que están empleando las diversas compañías en Chile”, precisó el médico veterinario de la Universidad de Chile.